Cigarrito

No te acabes nunca cigarrito

que la luna es momentánea.

Burbujas de humo salpican la ventana.

Embriagas mis labios en nicotina,

y con cada sorbo de melancolía

vuelves rito mi entierro de cenizas en agonía.

¡Pero qué ansias, pero qué ganas!

Sentimiento profano,

respiración ostentosa y horrorosa.

Últimos pestañeos en la neblina tóxica del tabaco.

Ronroneos de pulmones negros.

Muerte fría y decorosa.

Me disuelvo en humo finito.

No olvides que en la mano

porté siempre con orgullo,

mi fiel y amado cigarrito.


JNR


Entradas más populares de este blog

Poeta incierto

Mi llorar silencioso

Ángel caído

Silencio desaparecido

Incompetente

No me alcanza la vida

Una voz que se ilumina

Ira absoluta

Hay libros

Soy autista