Ya me cansé
Suspiro a lamentos
una
encarnación sin sentido.
Lamento
en suspiros
mi
felicidad diluida.
Carne
áspera.
Carne
pútrida.
Voy
callando
infinidad
de alegrías.
Dejar
de ser en soledad
se
ha convertido
en
mi mayor hábito percibido.
Qué
fastidio se ha vuelto
ser
sociable,
ser
amable,
ser
confiable.
Quiero
dar dos pasitos hacia atrás,
sentirme
invisible
en su estúpida
mundanidad narcisista.
Cómo
pueden,
cómo
pueden tener
tantas
fotos de ustedes.
Es
como tener la misma máscara:
repetida,
desgastada.
Con
tanto filtro
es
difícil reconocerles en persona.
Extraño,
extraño
apreciar
tonos
de piel morena
en
las redes sociales.
Ya
todos lucen blancos y blancas.
Si alguien ya tiene
un tono blancuzco,
lo
exagera aun más, es como:
Sí, soy blanca,
pero puedo ser más blanca.
Su
falsa felicidad me deprime
constantemente,
mente,
mente.
Odio
a los falsos eruditos
criticando
las terminaciones
en
mente.
Creo
que ha llegado la hora.
Terminar
mi odio
y
dejar de publicar.
Ser
un odioso silencioso.
Ahora,
solo
queda
reírme
de su vanidad.
Sí,
cada quien,
cada
quien
puede
hacer lo que le plazca.
Sí,
pero…,
yo.
Yo ya me cansé
de hacer lo que me plazca.
JNR