Tedio literario

Hormiga que en su caminar murmura

pasos quietos que resuenan vigorosos

va conquistando caminos en la llanura

por el pan quebrado vuelto trozos.

 

Hay hormigas obreras y hormigas aventureras

éstas últimas conquistan nuevas laderas

para el balance de la colonia en futuras eras

cuidándose de arañas patudas que resultan fieras.

 

Deambulas con tus antenitas de manera táctica,

sin razón aparente

van apareciendo en escena

más hormigas para llevarse las migajas

de manera ordenada y altamente práctica.

 

Mi tedio se ha vuelto tanto

que en este encierro necesario

escribo en el tedio de la soledad

y en mi eterna ambigüedad

dedico letras a pequeños insectos

que algún día y de manera permanente

no será más pan su comida, su alimento.

Sino mi carne pútrida,

abandonada de la vida

del tedio que me ahoga,

que me asfixia.

 

JNR

Entradas más populares de este blog

Poeta incierto

Mi llorar silencioso

Ángel caído

Incompetente

No me alcanza la vida

Una voz que se ilumina

Sombra de mi sombra

Ira absoluta

Hay libros

Silencio desaparecido