¿Por qué odio?
¿Por qué odio?
Si hay
pan en la mesa.
¿Por
qué odio?
Si mi
salud es plena.
¿Por
qué odio?
Si es
eterna la condena.
La
impaciencia
se va
volviendo tenue.
La
cordura
se
alza y me abraza.
Pero
yo no sé,
por qué, recurro
en
breves momentos
a mi
arrogancia enojada.
La calma,
es más;
pero,
solo basta
una
ligera estupidez
para
desatar mi ira.
Odio
el ruido.
Odio
las risas.
Odio
las visitas.
Odio
el cúmulo.
Odio
la soberbia.
Odio
al cerebro vacío.
Odio
la copia de la copia.
Odio
al prepotente.
Odio
la injusticia.
Odio,
la
diversión vacía.
Odio,
lo que
todos adoran.
Odio,
las
frívolas compañías.
Odio,
las
comodidades superficiales.
Odio no
avanzar.
Odio
el calor,
el
dinero, comprar.
Odio
rezar.
Odio
mis desánimos.
Odio
mis impotencias.
Odio
mis desgracias.
Odio
mis vacíos.
Odio
no escribir.
Odio
la
alegría del estúpido.
Odio
la
suerte del idiota.
¿Por
qué odio?
Si hay
letras en la mesa…
JNR