La vida comienza

¿En dónde deposito todo este conjunto de lágrimas arrugadas? El pájaro azul surca el vuelo mientras yo entierro mis pies en la arena pálida. El viento les da palmadas a mis susurros. La velocidad de la brisa acuña un manto de alivios. Mi florecita blanca se marchita con lentitud. Los lagos de añoranza me resultan distantes. El río está encima sobre mi cabeza. La tormenta comienza junto con la tiniebla húmeda. Mis destrezas no comprenden de literalidades. Las sombras me sostienen y me llevan por un camino de piedras rojas. La oscuridad me abraza de manera cálida. Mi luz se ha desvanecido, pero brota la imaginación de los colores dentro de la caverna. Los animales se deslizan en toda la oscuridad mientras aprecio sus historias. La crueldad humana reaparece. La caza, las lanzas, la desesperación, la sangre, el hambre. ¿Por qué la desdicha siempre me acompaña a todas partes? ¿En dónde se ha perdido aquel lucero de bienestar? Comienza el sonido, el sonido repetitivo de gotas retumbando sobre mi cordura. La caverna es húmeda, la caverna es angosta, la caverna me invita a ir más adentro. Arrastro mis alas rotas mientras sigo el camino del sonido. La luz vuelve a mis ojos, pero es solo un destello a la lejanía. He dejado de ser hombre, mis recuerdos comienzan a reiniciarse. Se apodera de mí una necesidad de alcanzar la luz dentro del corazón de la caverna. La luz comienza a desgastar mi mirada incrédula. He dejado atrás la caverna, mi cuerpo yace frágil, envuelto en sangre provista del manto oscuro, mi llanto emerge como desgarre del alma, es un llanto sincero, es un dolor purificado. La vida comienza de nuevo, el dolor permanece. Unos nuevos brazos me acobijan, me alimenta un pecho que calma mi hambre, las lágrimas han cesado junto con mi arrancada vida pasada. La curiosidad brota, mi vida ha vuelto a empezar a agotarse de nuevo. 

J. N. R.

Entradas más populares de este blog

Poeta incierto

Mi llorar silencioso

Ángel caído

Silencio desaparecido

Incompetente

No me alcanza la vida

Una voz que se ilumina

Ira absoluta

Hay libros

Soy autista