Mi despertar
Ruego al riego del
rizar
mis letras a la mar
entre sátiros destendidos,
comienzos de luz y de rocío.
Son entre los campos
las campanas mi despertar.
Lamentos de humo blanco,
son como espinas del rosal.
Es vívido mi alimento
divino,
tan pálido y fugaz.
Es ingenuo mi vil intento
en el recelo del agua salpicar.
Esparzo las nubes de
vino tinto
con trazos mal deseados
sobre cielos tiernos mi dibujar.
Noche ebria, noche inquieta.
Hay un cielo en mi
suplicar,
un paraíso eterno aguarda
bajo el cumplido de las grietas
ardiendo en aleteos al terminar.
Siempre fue espuma
blanca
mi concebido fruto al resonar.
Se esfuma de manera diáfana
sobre la incertidumbre de vivir.
Vuelven a sonar las
campanas
bajo el manto oscuro destellando.
Se separa la tierra y mi alma,
tan llena de pecados confesados.
Todo se riega
finalmente,
entre palabras y campanas.
Todo acaba, todo se siente,
todo se revierte, todo sana.
mis letras a la mar
entre sátiros destendidos,
comienzos de luz y de rocío.
las campanas mi despertar.
Lamentos de humo blanco,
son como espinas del rosal.
tan pálido y fugaz.
Es ingenuo mi vil intento
en el recelo del agua salpicar.
con trazos mal deseados
sobre cielos tiernos mi dibujar.
Noche ebria, noche inquieta.
un paraíso eterno aguarda
bajo el cumplido de las grietas
ardiendo en aleteos al terminar.
mi concebido fruto al resonar.
Se esfuma de manera diáfana
sobre la incertidumbre de vivir.
bajo el manto oscuro destellando.
Se separa la tierra y mi alma,
tan llena de pecados confesados.
entre palabras y campanas.
Todo acaba, todo se siente,
todo se revierte, todo sana.
J. N. R.

