Tiniebla
Soy viento y también…, soy polvo. Soy rostro vagabundo. Calamidad constante que come y traga; carne y sangre de un seno agonizante. Las tinieblas alumbran el reflejo retorcido de la luna distante, bajo el llanto de tu boca. Penetración alarmante en el atroz baldío, donde la carroña arde. Soy… el espíritu esparcido entre crucifijos roídos que anhelan el pecado. Soy… el eterno desvarío. El susurro que calla. Más la alegría guardada. Soy el dilema aborrecido. La caricia ingenua dentro de la pupila ciega. Soy lo que todos niegan. Soy la poesía que nadie dedica. Escribo en la noche mientras todos sueñan. Yo sueño despierto, entre el infierno y maldiciones. Soy al que no quieren, y solo leen, entre labios perfectamente sellados. Soy lo que soy… Y soy lo que dejará de ser. Soy el último destello de agua en el pozo seco. Soy la noche y el olvidado atardecer. Ya me voy... porque soy tiniebla. JNR